Este fue el nombre del taller impartido por la maestra Marcela Aguilar, en octubre del 2009 dentro de las actividades de la Muestra Nacional de Teatro.
Debo decir qué participar en este taller fue una experiencia de vida gratificante, el cuerpo del actor es su instrumento y como tal debe estar bien afinado, pero no basta con esto además, hay que saber tocarlo, pero no basta saber tocarlo además, hay qué ser un excelente interprete, pero no basta con ser un excelente interprete además, debe interpretar originalmente y para interpretar originalmente debo ser yo mismo, debo encontrarme, conocerme y expresarme desde mi yo interno.
Un buen camino para llegar a conocerme es a través de mi cuerpo físico ya que es un reflejo de mi interior, mi cuerpo expresa quien soy en realidad, no se puede mentir con el cuerpo, el cuerpo siempre dice la verdad. Una de las particularidades del ser humano y qué nos diferencia de los demás animales es qué podemos fingir en cierto nivel conciente corporalmente hablando, si nos sentimos mal nuestra postura corporal y nuestra gestualidad lo expresan, pero hemos aprendido a modificar esos estados naturales corporales y ocultarlos con una pose o una sonrisa fingida en el nivel más elemental, pero no se puede ocultar un estado de ánimo. Siempre el cuerpo lo va a exteriorizar de alguna manera: un gesto; una inflexión; un tono; una posición corporal leve nos va a delatar en cualquier momento. En contraposición un perro por ejemplo si está alegre menea la cola, si está triste o enfermo la mete entre sus patas, si está enojado ladra y muestra sus colmillos, ellos no mienten.
El actor y la actriz debe interpretar todas las emociones humanas, pero cada emoción tiene una proyección física diferente, por lo tanto es importante conocer cómo proyectar estas emociones o más bien como neutralizar nuestras propias emociones para qué el personaje que interpretamos pueda ser apreciado en su totalidad.
Para lograr lo anterior es necesario qué uno conozca su propio cuerpo, generalmente la mayoría de nosotros hemos sido mal educados en el aspecto físico y hemos adquirido una serie de malos hábitos a nivel corporal como malas posturas, inhibición de impulsos emocionales qué se traducen en tensión física, formas incorrectas de respirar etc. Pues bueno para lograr eliminar dichos hábitos es necesario primero aceptar qué los tenemos, una auto observación ayudará a detectar algunos, otros solamente los van a detectar personas especializadas como la maestra Aguilar, entonces hay qué estar abierto a la crítica.
Básicamente el taller trató de desarrollar una rutina física dirigida para ir conociendo nuestro cuerpo y sus posibilidades, pero dejando al cuerpo ser él mismo. La nobleza del cuerpo; cuando se le deja ser es increible y transmite una sensación gratificante internamente.
La maestra dice qué cada vez qué el cuerpo realiza un movimiento nuevo es como nacer otra vez; tener una nueva vida. Hicimos ejercicios grupales dirigidos utilizando nuestro cuerpo cómo elemento principal de contacto con el dónde y con nuestro compañeros de escena, tratamos de dejar de pensar con la cabeza y simplemente reaccionar con el cuerpo, el resultado genial, todo era nuevo y atractivo, se habián acabado los errores "Cuando uno Es no puede haber errores"
Simplemente reaccionás a lo qué pasa y el cuerpo nunca miente.
Por último técnicamente es importante conocer lo que dice el gesto de mi cuerpo para poder expresar lo que quiero en escena y dar el mensaje adecuado, este es nuestro trabajo, ser interpretes de un espíritu humano y entre más nos conozcamos exterior e interiormente mejores interpretes seremos.
Creo qué siempre queda algo de nosotros en cada personaje por qué partimos de nosotros mismos, pero el arte está en hacer una buena sociedad con el personaje para dejarlo expresar su vida en escena.
"Un actor siempre debe estar alerta observando sus lágrimas y su risa es esta doble función entre la realidad y la ficción de su actuación lo que constituye su arte" Константин Сергеевич Станиславский
Konstantín Sergéyevich Stanislavski
Debo decir qué participar en este taller fue una experiencia de vida gratificante, el cuerpo del actor es su instrumento y como tal debe estar bien afinado, pero no basta con esto además, hay que saber tocarlo, pero no basta saber tocarlo además, hay qué ser un excelente interprete, pero no basta con ser un excelente interprete además, debe interpretar originalmente y para interpretar originalmente debo ser yo mismo, debo encontrarme, conocerme y expresarme desde mi yo interno.
Un buen camino para llegar a conocerme es a través de mi cuerpo físico ya que es un reflejo de mi interior, mi cuerpo expresa quien soy en realidad, no se puede mentir con el cuerpo, el cuerpo siempre dice la verdad. Una de las particularidades del ser humano y qué nos diferencia de los demás animales es qué podemos fingir en cierto nivel conciente corporalmente hablando, si nos sentimos mal nuestra postura corporal y nuestra gestualidad lo expresan, pero hemos aprendido a modificar esos estados naturales corporales y ocultarlos con una pose o una sonrisa fingida en el nivel más elemental, pero no se puede ocultar un estado de ánimo. Siempre el cuerpo lo va a exteriorizar de alguna manera: un gesto; una inflexión; un tono; una posición corporal leve nos va a delatar en cualquier momento. En contraposición un perro por ejemplo si está alegre menea la cola, si está triste o enfermo la mete entre sus patas, si está enojado ladra y muestra sus colmillos, ellos no mienten.
El actor y la actriz debe interpretar todas las emociones humanas, pero cada emoción tiene una proyección física diferente, por lo tanto es importante conocer cómo proyectar estas emociones o más bien como neutralizar nuestras propias emociones para qué el personaje que interpretamos pueda ser apreciado en su totalidad.
Para lograr lo anterior es necesario qué uno conozca su propio cuerpo, generalmente la mayoría de nosotros hemos sido mal educados en el aspecto físico y hemos adquirido una serie de malos hábitos a nivel corporal como malas posturas, inhibición de impulsos emocionales qué se traducen en tensión física, formas incorrectas de respirar etc. Pues bueno para lograr eliminar dichos hábitos es necesario primero aceptar qué los tenemos, una auto observación ayudará a detectar algunos, otros solamente los van a detectar personas especializadas como la maestra Aguilar, entonces hay qué estar abierto a la crítica.
Básicamente el taller trató de desarrollar una rutina física dirigida para ir conociendo nuestro cuerpo y sus posibilidades, pero dejando al cuerpo ser él mismo. La nobleza del cuerpo; cuando se le deja ser es increible y transmite una sensación gratificante internamente.
La maestra dice qué cada vez qué el cuerpo realiza un movimiento nuevo es como nacer otra vez; tener una nueva vida. Hicimos ejercicios grupales dirigidos utilizando nuestro cuerpo cómo elemento principal de contacto con el dónde y con nuestro compañeros de escena, tratamos de dejar de pensar con la cabeza y simplemente reaccionar con el cuerpo, el resultado genial, todo era nuevo y atractivo, se habián acabado los errores "Cuando uno Es no puede haber errores"
Simplemente reaccionás a lo qué pasa y el cuerpo nunca miente.
Por último técnicamente es importante conocer lo que dice el gesto de mi cuerpo para poder expresar lo que quiero en escena y dar el mensaje adecuado, este es nuestro trabajo, ser interpretes de un espíritu humano y entre más nos conozcamos exterior e interiormente mejores interpretes seremos.
Creo qué siempre queda algo de nosotros en cada personaje por qué partimos de nosotros mismos, pero el arte está en hacer una buena sociedad con el personaje para dejarlo expresar su vida en escena.
"Un actor siempre debe estar alerta observando sus lágrimas y su risa es esta doble función entre la realidad y la ficción de su actuación lo que constituye su arte" Константин Сергеевич Станиславский
Konstantín Sergéyevich Stanislavski
Bueno hasta la próxima.
Fotografía: Revista Viva, La Nación,